- La
primera fuente que he elegido es un blog cuyo autor es Manuel Guillermo Silva, y
el título de este es: La abundancia de información da lugar a la pobreza de
atención.
He
elegido esta fuente porque es bastante actual, esta entrada de blog está
escrita en el mes de octubre de 2013.
El
autor nos habla del término “infoxicados”, que quiere decir, que estamos
saturados de información gracias a las nuevas tecnologías. Además nos habla de
que esta información nos permite “controlar”. La información es poder y, por tanto,
el conocimiento es dinero.
Haciendo
referencia a Herbert Alexander Simon, “La abundancia de la información da lugar
a la pobreza de atención”. Manuel Guillermo nos habla de cómo sorteamos mejor
las interrupciones, volviéndonos más intolerantes.
- La
segunda fuente que he elegido es una revista cuya autora es Eva del Rey Mataró,
El título de esta revista es “El mundo de los valores y la vida cotidiana en la
información en la actualidad”.
Me
ha parecido muy interesante y que esta vez nos hace una comparación de la
cantidad de información que existía antiguamente y la cantidad de información que
tenemos en la actualidad.
Esto
ha cambiado notablemente ya que antiguamente existía una escasez de información
que a día de hoy se ha convertido en una sobreabundancia informativa.
Este artículo, nos habla de cómo la información de actualidad forma parte de
nuestra vida cotidiana y cómo esta, se ha convertido en un ingrediente más en
el menú mediático.
- Reflexión:
Después de buscar información acerca de este tema, y de elegir estas dos fuentes puedo decir que estoy de acuerdo.
En la primera fuente, Manuel Guillermo Silva nos hace ver como las nuevas tecnologías son las causantes de esta sobreabundancia.
Es cierto que estamos saturados de información. Nos llega información de casi todos los sitios, ya sea la televisión, el móvil, las redes sociales...
Estamos continuamente en contacto con estos aparatos electrónicos y es por eso que forman parte de nuestro día a día. No creo que sea malo, pero creo que deberíamos tener un mínimo control, y no hablo de controlar las TICS, si no de un "autocontrol".
Un autocontrol de este uso, o si no serán las nuevas tecnologías, la cantidad de información las que terminen por controlar nuestras vidas.
Como futura docente y desde mi punto de vista creo que deberíamos hacer un uso moderado de estas tecnologías y siempre teniendo la capacidad y el derecho de decisión, no deben pensar por nosotros, debemos tener conciencia de nuestras decisiones a la hora de valorar una información u otra. La decisión es de nosotros y la clasificación de información también lo es.